Los zuecos tienen su origen en el latín "soccus", utilizado por los cómicos en el teatro romano. Surgieron originalmente en las regiones más húmedas de Europa, convirtiéndose en un calzado típico en lugares como Suecia, Holanda, Inglaterra y en comunidades del norte de España.
Se cree que este calzado de madera y cuero se desarrolló en zonas frías y húmedas para caminar sobre nieve y terrenos embarrados.
En España, su uso se encontraba primordialmente en zonas del Norte, como Galicia, Asturias, Cantabria, León, País Vasco, entre otras, destinados principalmente para actividades laborales en el campo. Los materiales utilizados incluían maderas como aliso, haya, nogal, castaño, álamo y abedul.
En los años 20, los zuecos llegaron a Nueva York y se convirtieron en un ícono playero. Desde entonces, han pasado por diversas etapas de popularidad, desde su apogeo en los años 70 con el movimiento hippie hasta su resurgimiento en la moda contemporánea.
A lo largo de los años, han evolucionado, adaptándose a los cambios de la moda y manteniendo su fama como un calzado atemporal y original.
En Pera Limonera no solo queremos apostar por la comodidad y seguridad de este zapato tan clásico, sino que además quisimos hacerlo ligero, para que lo puedas incorporar a todos tus planes, tanto en primavera como en verano.
Con una suela ligera que imita a la madera, convertimos este calzado artesano en su versión más versátil.
Los zuecos de madera son el complemento perfecto en verano. Combinan tanto con pantalones acampanados como con vestidos florales estilo boho. El detalle de las tachuelas sobre la suela de madera añade ese toque setentero que tanto adoramos lucir todos los veranos.
Además, también son ideales para el entretiempo. ¡Incluso en los días más frescos, puedes lucirlos con calcetines a la vista!
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