Dentro de PERA LIMONERA puedes encontrar un catálogo integrado por soluciones de corte Oxford, Legate o Full Brogue, entre otras. Además, también puedes acceder a modelos elaborados a partir de diferentes materiales y acabados. Desde fórmulas más frescas y actuales, hasta otras más clásicas y tradicionales.
A continuación puedes echar un vistazo a nuestra selección de modelos e identificar la opción idónea para ti a través de criterios de búsqueda como tu talla, colores, marcas (Callaghan, Cetti, Flauchos, IMAC, Pera Limonera, Pikolinos o Tolino entre otras) o precio.
¿No estás seguro de cuál es el modelo que se adapta mejor a tus necesidades? Te lo vamos a poner tremendamente fácil, a continuación compartimos contigo una pequeña guía sobre los diferentes tipos de zapatos que puedes encontrar en el mercado y sus combinaciones más recomendadas para cada situación: Uso diario en entornos de oficina, eventos y celebraciones más formales o situaciones más informales que requieren de propuestas más casual. ¡Presta atención!
Su principal particularidad es que las solapas que integran los cordones están cosidas en la zona inferior del zapato. Se trata de la alternativa más formal y, por lo tanto, está especialmente destinada a los eventos donde el protocolo y el código de vestuario ocupa un papel fundamental. Dentro de esta tipología existen cuatro modelos:
Entre todas las apuestas de costura prusiana, el modelo Oxford es el más clásico. Su estructura es la más básica y está especialmente orientada a contextos ceremoniales (ideal para con conjuntarse con chaqué) o en entornos cotidianos más formales en donde suelen complementar a un traje. Posee prespunte en la puntera y, a pesar de ser una alternativa bastante convencional, sigue siendo uno de los más utilizados.
El principal elemento diferenciador con las propuestas Oxford es su punteado distribuido por las costuras. Es utilizado principalmente en entornos de oficina.
La zona inferior de su estructura es similar a la de los modelos Legate aunque integra un picado en la puntera. Igualmente, está especialmente destinado a los entornos de oficina y suele ir combinando con camisa y pantalón de vestir.
La diferencia con los modelos Semi-Brogue se sitúa en un límite superior de la costura ubicada en la puntera. Su estructura es en pico y presenta dos arcos. El resultado es un acabado más llamativo. A pesar de todo, la naturaleza de su costura prusiana, lo hace apto para el ámbito formal. No obstante, en la mayor parte de las ocasiones, está presente en contexto. Para aquellos eventos más protocolarios o formales, no es muy recomendable, ni tampoco para su integración con soluciones chaqué.
Frente a las soluciones de costura prusiana, las propuestas a la inglesa presentan las solapas cosidas sobre el cuerpo del zapato. Existen tres modelos especialmente populares:
Posee una gran similitud con los modelos Oxford de costura prusiana, aunque cuentan con una horma más ancha. Como resultado, su acabado es bastante más informal. Puede ser una buena apuesta para ir a la oficina siempre que no lleves traje o en aquellos contextos en los que sea preferible vestir zapatos dentro de un dress code más laxo.
Tanto sus costuras como el área de su puntera están flanqueadas por un punteado, por lo que tiende a ser considerado como la versión de costura inglesa de los modelos semi Brogue. Su funcionalidad es similar: Tiende a quedar limitado a combinaciones con pantalones de vestir y camisa, aunque también con traje.
Son ideales en combinación con unos vaqueros o unos pantalones de vestir y una camisa. Está diseñado para dar cobertura a las situaciones más informales, pero que, dentro de su informalidad, exigen cierta elegancia. Está recomendado para aquellos que consideran el full Brogue demasiado formal.
Si has decidido optar por un modelo con hebilla, deberás prestar especial atención al pantalón con que combinarás tus zapatos. Para lograr un acabado más armónico deberá ser un diseño algo más estrecho de lo habitual. Además, su zona inferior deberá posarse ligeramente sobre el cuerpo de los zapatos para, por un lado, lucir las hebillas y, por otro, que el bajo no se enrede con ellas. Normalmente, los zapatos de hebilla tienden a combinarse con pantalones de traje con vuelta. Por este motivo, no suelen ser muy apropiados para las soluciones en chaqué, que bajo ningún concepto deben ser cortos ni integrar ningún tipo de dobladillo en la cara externa.
Los mocasines continúan siendo una de las alternativas más populares y versátiles. Destacan tres modelos:
El origen de su denominación se contextualiza en la costumbre de los estudiantes de la Universidad de Nueva Inglaterra de esconder un penique bajo el antifaz como un llamado a la buena suerte. Estos mocasines son bastante apropiados para lucirlos con traje de mañana. No obstante, la mayoría de las veces tienden a quedar relegados a las combinaciones con pantalones vaqueros.
Su antifaz está integrado a la pala con una costura rematada con nudos. Debido a su semejanza física con los rollitos de carne, adquirieron el nombre de “Beefroll”. Sus rasgos son los mismos que los del modelo anterior, no obstante, es más contemporáneo. De hecho, es el mocasín más utilizado en la actualidad.
Es más formal que los anteriores debido a que su horma es más elevada y presenta una estructura más cerrada. Posee un lazo que se extiende a lo largo del lateral y queda rematado por un nudo y una borla. Este es, de hecho, el origen de su nombre. Aunque dentro de su categoría es una propuesta bastante seria, no está al nivel de los modelos Oxford. No obstante, aun así, es apropiado para combinaciones con traje o pantalones de vestir.
Su origen se remota al siglo XVIII. Posee una estructura de zapatilla y está coronado por un lazo, normalmente de seda. Su uso solo está recomendado para combinaciones con esmoquin.
En un inicio fueron diseñadas como una fórmula de estar por casa para el contexto aristocrático de Gran Bretaña. Su cuerpo en terciopelo y bordado en la zona de la pala es bastante particular. Los Slippers se han hecho especialmente comunes dentro de dress codes Black Tie, es decir, en combinaciones con esmoquin.
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